Luego nos dice el Evangelio que Jesús baja al templo a enseñar. Y los escribas y fariseos le traen a una mujer encontrada en "flagrante" adulterio.
le hacen una pregunta para ponerlo a prueba: La ley de Moisés dice que apedreemos a estas mujeres, ¿tu que dices?. Jesús se inclina en el suelo para escribir en la tierra.
Importante aquí ver que Jesús antes de que le traigan a esta mujer en frente, él está en oración. Solo con la oración es posible tener una reacción como la que tuvo Jesús, una reacción misericordiosa. Quien ha estado en oración se le reconoce por la "compasión" que manifiesta ante los demás que sufren. Jesús es un "experto en el Espíritu", recordemos lo que dice: " El Espíritu de Dios está sobre mí, porque me ha Ungido" ( Lc.4,16)
Por otra parte los escribas y fariseos ," expertos en la ley" le presentan a la mujer y la ley que les respalda.
Es el diálogo entre dos expertos: Unos de la Ley, y otro Invadido por El Espíritu. Es curioso que la ley está escrita en piedra ( las tablas dadas a Moisés). La piedra es un material rígido, no moldeable, duro. Sin embargo en el momento en que le presentan a Jesús la ley ( la piedra), Jesús lo que hace es inclinarse y escribir en el suelo, en el polvo. El barro es un material moldeable. El Génesis nos dice que fuimos hechos del barro, material moldeable, frágil, que se puede hacer y re-hacer de nuevo.
Vemos aquí un diálogo entre la piedra y el barro, entre la rigidez y un corazón misericordioso.
Además es interesante que desde el inicio los escribas y fariseos se escudan en la ley: "la ley de moisés dice"......... que hay que apedrear. Es decir la ley me dice que puedo hacer daño, causar dolor y sufrimiento a otros, y no peco, porque la "ley" me cubre. Si infrinjo dolor, es algo legal.
Recordemos que no todo lo legal es justo. El ser humano tiende a obedecer en algunos
momentos aunque esta obediencia infrinja dolor a otros, exculpándose en la obediencia. Cabe recordar aquí el experimento famoso narrado en el libro "Obediencia a la Autoridad", del autor: , en donde de alguna manera se comprueba hasta donde estamos dispuestos a llegar los seres humanos.
En la segunda guerra mundial, se hicieron atrocidades cumpliendo leyes, había personas que su "trabajo" era abrir las llaves del gas.
Por otra parte es importante recordar que toda acción, brota de un modo de pensar que me lleva a sentir de una determinada manera. El recorrido interno es :
1º Pienso de una determinada manera
2º Este pensar me hace sentir tal cosa
2º Al sentir eso, re-acciono.
En Jesús, vemos una re-acción ante la mujer pecadora, porque "piensa" como su Padre Dios, que es un Dios de Amor. El pensar así le hace "sentir" compasión y por tanto su "acción" es perdonar.
El enjuiciar a otros brota de una "exigencia" interior muy alta, que a la vez la exijo a los demás. Por ejemplo, si digo: "Yo, o soy ...o no soy....", esto ya implica un pensar en "blanco o negro". la vida no es ni blanca ni negra, hay una serie de matices que los encontramos dentro de nosotros, eso lo sabemos todos.
"Pensar" así, me hace "sentirme" exigido, y por tanto exigiré a otros.
Invito a los lectores a que pensemos en: ¿Cómo está mi dialogo interno entre la piedra y el barro, entre mi rigidez como persona y mi compasión hacia otros y hacia mí mismo?
Invito a reflexionar sobre mi manera de "pensar" ( cada uno de nosotros tenemos un listado de frases, de filosofía de la vida, con la que solemos solventar las encrucijadas de la vida propia y de otros, por ejemplos: "El que me las hace, me las paga", " el que peca, es un sinverguenza" , "los hombres son superiores a las mujeres", " " la letra con sangre entra" , "todo se paga en esta vida", " no olvides quien te hizo daño, hasta que lo pague" etccccc.
Cada uno tenemos un listado, puedes hacer el tuyo, y darte cuenta cómo este modo de "pensar" te hace " sentir" de una determinada manera ( sea para contigo mismo o para con otros", y esto a la vez te lleva a hacer las cosas que haces.(" acción")
Jesús perdona ("acción") porque "siente" compasión, que proviene de un modo de pensar: "todos somos frágiles, débiles. El pecador lo que necesita es compasión".
El Evangelio no nos dice si esta mujer se convirtió, lo que si no olvidará esta mujer es el encuentro con Jesús, con su mirada, con su forma de pensar y sentir, que hizo que tuviera compasión de ella.
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ResponderEliminarEste pasaje es uno de mis preferidos. Supongo que la mujer acostumbrada a no tener más valor que una cosa o propiedad cualquiera recordará su encuentro con Jesús, su vida a partir de entonces a buen seguro que en algo cambió. Una sola mirada de amor nos cambia. Quisiera que el Espiritu Santo me concediera del don de mirar cada día de mi vida y en cada momento con amor.
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